Mi legado en la vida es tratar en posibilidad de evitar el sufrimiento humano. Es mi instinto, es lo que me sale, lo que siento. Interpretando cada acción, cada movimiento para poder descifrar mas allá de lo que podrá ser mi futuro.
“Siempre quise ver lo que me imagine, porque se me eriza la piel cuando veo a un pobre tipo tratando de caminar por la línea de la vereda, midiendo cada paso, obsesionado por la perfección del siguiente.”
Esas fueron mis palabras escritas en mi cuaderno a las cinco de la mañana cuando acabe de ver una película “Mejor…imposible”, la combinación perfecta; un neurótico, un perverso y un psicótico. Fui tan feliz sentada en un puff con talco que además de mis pies cubría mi pantalón azul. Fue perfecto, todo lo que necesitaba… mis parpados tendían a cerrarse pero mi énfasis por servirme de nuevas situaciones pedía que siga allí deleitando mi vista, mi mente y mi alma. Es extraordinario el esfuerzo que hace uno cuando adjudica todas las fichas de una manera u otra hacia un objetivo… en esta circunstancia permanecer lucida…
Cuando daría por sentir hoy lo mismo…las horas pasan y en cada segundo me expongo a abrir una maldita puerta y a derrumbar mis construcciones… porque aunque ignore a un estudiante de arquitectura se que la base es lo importante, que si esta firme nada podrá derribarla, quedara intacta suceda lo que suceda. Lastima que no pude comenzar una nueva construcción porque siempre algo renace desde abajo, los escombros no fueron eliminados, no se han quitado de mi paso…
Y ya no quiero ver más, odio el lugar en el que nací, odio toda mi vida. De nuevo me pesa el pecho, se me inunda de eso que nos hace mal. No quiero ver tu camisa pretendiendo ser un hombre formal con tu vida armada o un payaso que decidieron tomarlo encerio. Odio los motivos que adjudicas, adjudico o adjudican a desbastar mi alma para comenzar nuevamente al delirio continuo.
Porque solí aprender que es más llevadero mirar hacia otro lado, pero cuando las circunstancias no dicen “una buena para Selene!!!!”. Suele ser complicado guardarlo todo adentro, no poder pasarlo a palabras, contárselo a alguien, compartirlo, descargarlo…pero puede ser una gran descarga pasarlo en simples letras que quizá no den una interpretación certera, o lleven a cualquier construcción.
Pueden observarse
Prefiero verlos en ese mismo instante y no encontrarlos en una imagen tomada plasmada en algún lugar…
Sí, yo también a veces odio el lugar en el que nací, yo también a veces odio toda mi vida...pero por suerte es "a veces"...ocurre otras veces en las cuáles la intensidad de estar viva se siente tan hermosa...que vale la pena sufrir un poco hasta llegar a esos momentos tan nuestros...tan nuestros.
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